Celebrado por primera vez en 1840, en Suecia, esta fecha tiene como fin generar conciencia sobre la importancia de estos aliados silenciosos que son esenciales para lograr un desarrollo sostenible.
Los árboles juegan un papel fundamental en la conservación del ambiente ya que proveen múltiples beneficios ecosistémicos a las poblaciones de todos los rincones de la tierra:
regulan los ciclos hidrológicos, mitigando inundaciones;
liberan oxígeno y capturan gases de efecto invernadero;
previenen la erosión de los suelos;
contribuyen a regular el clima, reduciendo los efectos del cambio climático.
Son hábitat para la diversidad biológica.
En las grandes urbes, los árboles reducen la contaminación atmosférica, visual y sonora, generando bienestar fisiológico, sociológico y económico a la población.
Son materia prima para la elaboración de medicinas, alimentos, fibras, entre otros insumos que sustentan nuestra vida diaria.
Para muchas culturas, los árboles son parte de su patrimonio natural y cultural, representan historias, están asociados a su identidad o tienen un significado espiritual que los hacen especiales y venerables.
Desde el CGCF, nos parece importante conmemorar esta fecha por todo lo mencionado anteriormente, como ciudadanos debemos ser consiente de su importancia tanto en las zonas rurales como urbanas, siempre asociado a mejorar nuestra calidad de vida.
Quebracho colorado santiagueño